Cómo hacer un time lapse

Kia ora amigos.

Aquí voy con el siguiente artículo. Desde que los vi por primera vez, los "Timelapse" siempre me llamaron la atención.

"Esa forma tan elegante de mostrar tanto contenido en tan poco tiempo y con tanta belleza"

Aunque claro, con tanta tecnología, los aficionados nos quedamos tan atrás en estos temas... Ahora con las monturas motorizadas, con los programas de ordenador conectados a ellas y, ¿por qué no?, con el dinero que cobran por hacerlos. A ellos no les quita tiempo de sus vidas.

Vamos al lío. Los materiales son muy parecidos a los del último post (Cómo hacer un Startrails): Una cámara digital, un trípode y en este caso, para mejorar la calidad y no morir de aburrimiento, un ordenador conectado por USB a la cámara y el software DSLR Remote Pro o similar.
*Aunque sean programas de Windows, me gustaría aclarar, que todos los programas que utilizo y/o sugiero son gratuitos y se pueden utilizar desde Ubuntu, que es el sistema operativo que utilizo.

El procedimiento es sencillo. Lo primero que tenemos que hacer es elegir lo que queremos fotografiar. Os dejo varios ejemplos en los que ni siquiera usé trípode ni ordenador (a pulso sobre algún objeto y marcando los tiempo a ojo).

 

Más que nada, para probar si funcionaba y si eran buenos los tiempos.

Entonces llegaron dos momentos perfectos para practicar: 

- El primero me gustó mucho, pues pude unir mi pasión "lunática", con mis ganas de aprender técnicas de fotografía. 

El 15 de junio de 2011, volviendo de la playa, me acuerdo de que hay un eclipse lunar que será visible desde casa. Así que ansioso por llegar a casa empiezo a pensar cómo hacerlo. Subo la azotea de casa, con un alargador (a mi portátil ya no le funciona muy bien la batería), la mochila de la cámara, el trípode y una curiosidad increíble. ¿Saldrá bien?

Tras más de media hora sin poder encontrar la Luna... Había llegado tarde y sólo podría ver cómo la Tierra se apartaba y dejaba que ésta se mostrase.

Programé el ordenador en dos momentos diferentes: El primero abriendo el obturador lo suficiente como para poder apreciar la poca luz que del Sol reflejaba. Después tuve que cerrarlo más porque tanta luz quemaba la foto.

En total, 2700 imágenes, que el programa iba guardando directamente en mi disco duro para después poder unirlas con el programa de edición de vídeo. (Ésta vez tuve que recurrir a un programa en su versión de evaluación, pues tantas imágenes hacían que el ordenador no diese para más).

Como podéis ver en el vídeo, tuve que mover el objetivo en varias ocasiones para que la Luna no saliera del encuadre. Ojalá tuviera una montura motorizada... jejeje

- El segundo fue por un sentido completamente distinto, pues tuve la oportunidad de grabarlo en Senegal, en un campo de trabajo que tuve la suerte de compartir junto a Scouts de Andalucía y de Senegal.

Los días que vivimos en Senegal nos marcaron muchísimo, y muchas fueron las cosas que nos llamaron la atención. Pero para mí -que tuve la suerte de pasar más días allí, viviendo de primera mano el día a día de personas que ahora aprecio muchísimo- hubo algo que me hizo reflexionar en cada minuto que pasamos en Senegal, mientras nos trasladábamos de un sitio a otro, en autobús, andando, en taxi...  

Y es eso lo que quise reflejar con este vídeo.

"En el día a día que nosotros vivimos no nos damos cuenta de lo que hace la gente de nuestro alrededor, y eso no nos importa. Pero cuando sales de tu círculo cercano te concentras más en esa tarea. Para mí esto se multiplicó de forma exponencial cuando llegué a Senegal: atento a cada gesto, a cada esquina, a cada mirada... Es algo que no puedo evitar, pero mi latido aumenta su ritmo, como si me sintiera acorralado, como si sintiera miedo."

Pero Senegal es así, es gente, es barullo, es ruido, es orden desordenado, es contraste... pero todo eso esconde la verdadera realidad, que es lo que aprendido: Senegal es MOVIMIENTO.


E noho ra.





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